EMJAY habla de Me estoy volviendo loca: un proceso de autoconocimiento, diversión, dolor y catarsis

26

En su segundo álbum, la artista mexicana plasma sus momentos más oscuros y luminosos, siempre con un sonido explosivo.

Tras consolidarse como un referente femenino del trap mexicano con su álbum LAS MORRAS TAMBIÉN HACEN TR444P, EMJAY regresa con Me estoy volviendo loca, un segundo trabajo que refleja dos años de exploración sonora y crecimiento personal.

En este nuevo disco, la artista expone sus vivencias más oscuras y sus momentos brillantes y despreocupados. Canciones como “boss” (y su remix con Belinda), “Vuelta Atrás” y “Flash y pose” sonaron mucho en las redes sociales, mientras que otras, como “Leyenda”, revelan una vulnerabilidad más profunda. EMJAY demuestra una vez más su versatilidad, transitando con facilidad de hablar sobre la lucha con su salud mental a crear temas más ligeros, como el dedicado a su lip combo.

Lo que podría parecer simpleza en sus letras, en realidad es sinceridad. Cada tema plasma una parte de su historia, desde los momentos triviales hasta los más complejos. En una de sus declaraciones más emotivas, EMJAY admite que no puede hablar de “Leyenda” sin que se le quiebre la voz, como confesó en esta entrevista con ROLLING STONE en Español. Sin embargo, también se muestra divertida y relajada cuando menciona que “Wanna Touch It” es simplemente una canción divertida.

Su sonido, lejos de encasillarse en un solo género, se basa en las emociones. Fusiona hyperpop, electrónica, ritmos urbanos y guiños al pop mexicano de los 2000, siempre manteniendo la energía que la caracteriza. EMJAY toma influencias de diversos géneros, pero las filtra a través de su propio estilo y esencia única.

Me estoy volviendo loca también funciona como un ejercicio de empoderamiento personal y colectivo. A lo largo del álbum, EMJAY lanza una crítica a la falta de comunidad y apoyo mutuo dentro de la escena musical, al tiempo que reivindica la importancia de la sororidad y el impulso entre mujeres. Hay temas que celebran el poder femenino. Además, el disco dedica espacio a la representación de la comunidad LGBTIQ+, con canciones que abrazan con orgullo su identidad. 

En esta conversación con ROLLING STONE en Español, EMJAY se muestra vulnerable al hablar sobre las dificultades que enfrentó durante su crecimiento. Detalla cómo esas experiencias la han formado tanto en su carrera artística como en su vida personal. Además, comparte las luchas internas que ha atravesado con su salud mental y cómo han influido en su proceso creativo y en la búsqueda sonora que definió Me estoy volviendo loca.

Me gustó mucho el disco…

Ya quiero que salga, neta sí me estoy volviendo loca. No pensé que se manifestara tan fuerte.

No pretendo que me cuentes toda tu biografía, pero sí quiero regresar un poco al pasado. Estaba viendo unas entrevistas y en una dijiste que pasaste muchos años sin ser tú, intentando encajar.

Siempre sentí que era diferente, ¿sabes? En mi escuela la gente actuaba de cierta forma y yo nunca me sentí parte de eso. Tenía mi grupo de amigas y las amé, pero no sentía que pertenecía. Mi familia siempre me apoyó, se preocupó por mí, me aman, pero nunca sentí que fuera de ese linaje, de esa forma de vivir. En mi familia todos son abogados, licenciados, administradores, contadores. Yo iba a estudiar arquitectura, pero algo me decía que no, que no era lo mío. No sabía qué sí lo era, pero sabía que eso no.

¿Por qué arquitectura? ¿Qué te llamaba la atención?

Decidí que quería ser arquitecta mientras trabajaba como albañil en Canadá. Algo que mucha gente no sabe es que empecé de albañil, pero en ocho meses terminé siendo jefa de demolición y tenía mi propio equipo. Pasé de ser una albañil más a tener experiencia en distintas áreas de la construcción, y ahí fue cuando me empezó a apasionar la arquitectura. Me acuerdo que mi jefe sabía que me iba a regresar a estudiar y me dijo: “Termina tu carrera, y cuando vuelvas quiero que trabajes aquí”.

Está bueno ese título: “jefa de demolición”, la boss de la demolición.

La jefa del triple 4 y de la demolición.

Has contado que creciste con muchos problemas en casa, aunque siempre estuviste apoyada por tu familia. ¿Cómo viviste ese contraste?

A mis papás les agradezco todo… ¡ya empecé a llorar! Ellos me educaron de la mejor manera y siempre hicieron todo para darme lo mejor: educación, vida, oportunidades. Mucha gente cree que soy una nepo baby o que mis papás me mantienen porque fui a una escuela privada. Pero, hablando desde mi privilegio, no vengo de una familia con muchos recursos. Mis papás se partieron la madre para darnos una educación privada a mi hermano y a mí, un viaje al año… todo lo que tenían, nos lo dieron.

Mi familia fue muy disfuncional. Una cosa es cómo te educan como hijo y otra los problemas que hay en casa. No me gusta hablar de eso, pero son situaciones que me marcaron y me hicieron quien soy. Las disfunciones no tienen nada que ver con el amor y el apoyo que me dieron como padres.

Cuando empecé en el trap tuve muchos problemas con mi mamá. Dejamos de hablarnos por dos años. Fue la única vez que no logró entenderme, por las decisiones que estaba tomando o por lo que ella imaginaba que era la industria. Pero desde que fui al psiquiatra, todo cambió. Decidí hablarle a todas las personas con las que tenía algo pendiente. Y gracias a eso, volví a hablar con ella.

¿Cómo influyeron esos problemas en la persona y artista que eres hoy?

Los problemas psiquiátricos que tengo son hereditarios, vienen de mi mamá. Ver su deterioro por ciertas situaciones marcó mi personalidad. Por eso le doy tanta importancia a mi salud mental. Me forjó totalmente. Y me permitió también jugar con mis traumas, hablar de la locura. Mucha gente dice que la romantizo, pero son mis traumas y hablo de ellos como quiero. Si digo que estoy enferma mental, es porque lo estoy. Son mis traumas, mis chistes.

Crecí rodeada de infidelidades, de discusiones entre mis papás, y de los problemas psiquiátricos de mi mamá. Eso me hizo empática, alguien que necesita comunicarse, expresarse, que no soporta los conflictos. Me volvió hipersensible. Lo bueno y lo malo que viví desde niña me convirtió en esta vieja loca, hipersensible y chambeadora. Le agradezco todo a mis papás.

Cuando empezaste en la música, ¿qué fue lo que te atrapó del trap?

Siempre he escuchado trap, desde chiquita. Escuchaba muchos géneros, pero tenía una conexión con el trap y el rap en español. Por ahí de 2022, justo cuando terminaba mi contrato con la banda de pop que tenía (Lamentablemente Flow), conocí a unos chicos que estaban en esta nueva ola de trap. Terminé muy mal con la banda y mi subconsciente me dijo: “Haz todo lo contrario a ese proyecto”. Fue arriesgado, pero algo me empujó a hacerlo.

Sentí, aunque ellos no lo hacían de forma consciente, que había un rechazo hacia las mujeres. Quizás era inseguridad mía por ser la única morra. Pero sentí la necesidad de demostrar que a las morras también nos encanta el trap, y que podemos decir lo mismo que un güey. Me empecé a cuestionar por qué no había más mujeres en el foco, por qué si las había no las pelaban. Así empecé: con el capricho de preguntarme por qué no estábamos ahí.

Y me di cuenta de que era el género donde mejor me sabía expresar. Se volvió parte de mí.

Y sí lograste convertirte en una representante femenina del género…

Sí, creo que sí se logró. Y me llena de orgullo. Me emociona que ahora haya chicas que me ven como inspiración para entrar al género. Fue una buena decisión seguir mi instinto.

¿Cómo es tu relación hoy con Las morras también hacen tr444p?

Me encanta. A veces lo escucho y pienso “¿por qué dijiste eso?” (ríe), pero es mi primer álbum, mi primer hijo. Le tengo un cariño enorme. Me hizo conectar con muchísima gente, crear una base de fans increíble que siguen conmigo. Es muy distinto a Me estoy volviendo loca, pero justo de eso se trata: de mostrar versatilidad.

Y ahora, más que moverte por géneros, te mueves por emociones, ¿cierto?

Sí. En esta era del internet hay demasiadas cosas: culturas, géneros, mezclas. Le preguntas a un artista qué género es su canción y te dice: “es como hyperpop, trap, jersey…” Ya no importa el género, importa qué te hace sentir. Qué emoción te quiere dar el artista con su obra.

En un video mencionaste el libro Roba como un artista. ¿Cómo navegas la línea entre inspirarte en alguien y apropiarte de su trabajo?

Ese libro me cambió la vida. Antes me pesaba mucho que me compararan. No entendía por qué lo hacían si solo estaba haciendo mi música. La gente es mierda y más con las mujeres. Nos ponen a competir todo el tiempo. Maria Bottle me recomendó ese libro. Lo leí y entendí que sí me inspiraba en otras artistas, pero ellas también lo habían hecho antes. Ya todo está inventado. Y entendí que no tenía nada de malo. Ahora comparto mis inspiraciones abiertamente. Me encanta reconocerlas. Mi música es eso: mis influencias más todo lo que tengo yo por aportar.

Y hablando de influencias: en Me estoy volviendo loca hay pop mexicano de los 2000, electrónica, Charli XCX… ¿Cómo fuiste formando esa paleta?

Fueron dos años y más de 120 canciones para realmente encontrar lo que quería decir con este álbum. Mi proyecto como solista empezó hace poco, dos o tres años. Y en ese tiempo tuve que encontrarme a mí misma. Me equivoqué, me perdí, me rompieron el corazón, mis amigas también me rompieron el corazón. Viví deslealtades, conocí a personas que marcaron mi vida… Todo eso me ayudó a descubrir mi sonido. Lo encontré viviendo.

Qué increíble que en ese proceso artístico, también hubo tanto autoconocimiento.

Totalmente. Descubrí quién era EMJAY.

El disco iba a salir en octubre y decidiste aplazarlo. ¿Sentías que todavía no transmitía lo que querías?

No pude hacerlo. Ya tenía como 18 tracks y estaba listo para salir, pero le dije a mi disquera que no estaba lista…

¿Por el sonido? ¿El mensaje?

Por el sonido. Rehice maquetas, busqué nuevos sonidos, viajé. Fui a España y ahí nacieron algunas canciones. Ese viaje fue un parteaguas. Encontré un sonido que pude adaptar a lo que quería hacer en México. Ahí todo empezó a tomar claridad. Leí Roba como un artista allá, y desde entonces todo se alineó. Decidí no sacarlo todavía. La disquera casi me mata, me daban carta de retiro. Pero no me arrepiento. De ahí salió “Boss”. Los tiempos de Dios son perfectos. Mis fans también casi me matan.

Gracias a María Bottle por recomendarte ese libro.

Le debo mucho. Y también a mis amigos. Ellos, junto con mi familia y mi equipo, son mi otra familia. Nos ayudamos y nos damos felicidad. Les debo la vida. Todo lo construimos juntos.

Has dicho que crear Me estoy volviendo loca, te volvió loca. ¿Cuáles fueron los retos?

Todo lo que viví me volvió loca. Mi mejor amiga me hizo una de las peores cosas que alguien te puede hacer, y yo solo pensaba: “Esto está pasando por mi álbum”. Me rompían el corazón y pensaba: “Genial, otra canción. Me voy al estudio”. Este disco está hecho 100% de mis vivencias. Por eso hay cosas muy personales y otras muy cotidianas.

El título es importante porque estos dos años han sido los más libres de mi vida. Me atreví a experimentar, a ser yo. Fue la gente la que decidió llamarme loca. Y si por ser libre, vestirme como quiero y ser quien soy me llaman loca… entonces sí, me estoy volviendo loca.

Me gusta mucho que hay canciones con letras felices o tristes, pero todas mantienen ese sonido explosivo.

¡Justo! Qué bueno que lo notaste. Por ejemplo, Vuelta Atrás tiene una letra tristísima, pero en vivo la bailan porque el ritmo está muy hypeado.

Y Leyenda también: tiene una letra fuerte, pero no suena melancólica.

No sé cómo le voy a hacer para cantarla en vivo. Cada vez que la escucho, lloro. No puedo oírla sin llorar. No sé qué pasará con esa canción en el show.

Has descrito el disco como versátil. ¿Querías demostrar esa versatilidad?

Sí, pero creo que la gente ya lo sabe. Algo que me encanta es que mis fans nunca saben qué les voy a entregar. A menos que lo spoilee, como con este álbum que me volví loca y lo spoileé todo (ríe). Pero no me arrepiento. Fue una buena estrategia.

¿Cómo te sientes en el escenario?

Agradecida. Antes me sentía estresada, nerviosa, insegura. Ahora me siento poderosa. Feliz.

Track x track

EMJAY habla sobre lo que hay detrás de cada de las canciones de Me estoy volviendo loca. 

La jefa del triple 4

La creé en Madrid, con Liam, un productor. Cuando se presentó me dijo: “Soy Liam, pero con 4” (Li4m). Desde ahí hubo un clic. Se sabe que esa canción fue para alguien en específico de la escena mexicana. Alguien que no me cae muy bien. Me molesta que, cuando alguien tiene poder dentro de la escena, no lo use para jalar a más gente. Ese día estaba frustrada y fiera por esa situación. El hecho de que, cuando alguien pega, no aproveche para jalar a su banda. Yo apenas estoy empezando a crecer y lo primero que voy a hacer es jalar a mis amigas. Si crezco yo, crecemos todas.

Leyenda

Es la canción más personal del álbum. (Llora) Te juro que no puedo hablar de ella sin romperme. La escribí a partir de todo lo que una persona vive cuando tiene un sueño, pero se topa con mil frustraciones y trabas. En el coro digo: “qué ganas de sumergirme para que ya me entiendan, que ya no quiero seguir, si muero sería leyenda”. Y es que a veces sientes esa presión constante: de la gente, de los haters… Es duro.
Hay una idea errónea de que, por ser artista, uno puede aguantar todo. Como si no tuviéramos corazón. Pero los comentarios destructivos, las opiniones que nadie pidió, llegan igual. Y no son críticas constructivas: son ataques que no tienen nada que ver contigo, y aun así te los lanzan, como si su intención fuera arruinarte la vida.
Esa canción la hice porque, claro que me duele. Claro que me lastima leer tantos comentarios negativos. Cuando tienes un sueño y solo encuentras obstáculos una y otra vez… hay momentos en los que, sinceramente, sientes que ya no puedes más. A mí me pasó. Me pesaba tanto todo, que hubo veces en las que pensé: “quiero matarme”. Es muy difícil estar en este medio.  En el interludio incluí audios de toda mi familia. Eso también la hace muy especial para mí. Están mis abuelos, mis papás, mi hermano… Decidí ponerlos porque ellos han sido mi red, mi refugio, los que me han sostenido cuando ya no podía más.

Wanna Touch It

Is just a funny song. Es lo que te digo: un día me quise matar, pero otro día solo estaba divertida. La hice con Chino Sidechain, un productor de Argentina con el que también hice ‘Im a slut’. Solo es una canción chistosa, no tengo nada más que decir. Una canción sobre cómo vive una boss.

flash y pose

Solo quería una buena canción para enseñar mi lip combo. Es tan importante y nadie le había dado el reconocimiento necesario.

$ex $ymbol

Una locura. La creamos en España. Amo a Metrika, ella vive en Granada y viajó en tren, ida y vuelta, solo para ir al estudio a hacer esa canción. Shoutout a ella por ser hermosa. Yo pensé: “la gente no va a esperar nada más que dos enfermas hablando enfermedades”. La más loca de España y la más loca de México, ¿qué tenemos que hacer? Pues $ex $ymbol.

Drama doll

Habla sobre mis pastillas. La hice un día en el que me había empastillado porque tuve un ataque muy fuerte y tomé un poco más de la dosis de mis ansiolíticos. La hice con Brujo, el mismo productor de ‘boss’. Estábamos en el estudio, era un martes, eran las 3. Lo menciono en la canción. Te digo que es lo que vivo. Dice: “otra vez son las 3, me di de más”. Acababa de coger con un chico y me dijo que era el amor de su vida… y luego regresó con su exnovia. A todos nos la meten y luego nos mienten (ríe).

Boss remix ft. Belinda

La gente cree que fue una estrategia de marketing porque nuestra disquera era la misma. No. Todo comenzó por un comentario de Belinda cuando saqué la canción. Llegó mi manager y me dijo que checara mi celular. Cuando lo vi me sorprendí, hasta revisé que fuera la cuenta original. Le mandé un mensaje: “¿Qué onda, es en serio?”, y me contestó: “Sí, hay que juntarnos en el estudio”. Una reina. No pude haberle dado el remix a mejor persona. Además de que es una gran inspiración en el pop y en el álbum, ella es el claro ejemplo de una boss. Ha sido un ícono en México. Fue y será la reina del pop siempre. Estoy contentísima con el resultado. Son las dos bosses de México juntas. Pronto la vamos a cantar en vivo.

drill.mp9

La hice en 20 minutos. Es hacia un chico —no diré hacia quién, porque no quiero que su pene quede plasmado en esta entrevista—. Pero también habla de mis vivencias. Es una canción muy divertida. Fue la que más trabajo costó sacar con Warner por todos los samples. Mi disquera tuvo que contactar a todos. Cuando les enseñé el álbum me dijeron: “te odiamos”. Solo porque es muy bueno no vamos a decirte que no. Los puse a chambear. Casi no sale porque conseguir la licencia de Ms. Lauryn Hill fue muy difícil. Es de mis favoritas del disco. La hice en 20 minutos porque escupí puros factos.

Como antes ft. Gera

Hay otro Gera MX en esa canción. Ya teníamos dos canciones, pero no había sido un sencillo mío. La hicimos el 1 de enero. Yo estaba pasando sola el año nuevo y nos escribimos. Le dije: “¿cuándo hacemos una canción?”, y me respondió que la hiciéramos para mi álbum. Le dije: “pero ya”. Y un día después la estábamos haciendo. Estoy muy agradecida con Gera, me ha apoyado mucho en mi proyecto y también le agradezco que logró adecuarse al álbum. Así salió ‘Como antes’.

Ponte a chambear

Estaba saliendo con un cabrón que no mames… tuve que mantener muchísimo tiempo. Me estaba consumiendo. Así salió el coro. Después hago unas cuantas confesiones, como que me gustaba más su amigo. Espero que, si lee esta entrevista, no sepa que es él.

Música pa gays

Mi tracklist se hizo un poco viral porque la gente criticó demasiado. No entienden la puta vibra. Esa fue de las que más juzgaron, porque no tienen idea de lo que es. Es muy divertida y me encanta cantarla en vivo. La gente se prende muchísimo. Es una canción que representa a la comunidad, a mi comunidad LGBTIQ+. Es para ellos, y cuando la canto, veo lo libre que se siente la gente. Me hace muy feliz que exista.

Pu$$y Power

¿Sabías que la hice hace como tres años? Antes de que saliera Las morras también hacen tr44p. Para la gente que dice que le copio a Charli XCX, este proyecto ya lo venía trabajando desde hace mucho. La hice con Julián Bernal, un productor colombiano increíble. También es para nuestra comunidad. Me encanta el vogue, me encanta el mundo drag, esa cultura. Me rodeo de gays, soy bisexual, la cultura es mi 24/7. Esta canción también la siento muy de la comunidad y para expresarnos. Es de mis favoritas.

bota ft. Lismar

Es como un funk brasileño con trap. Amé trabajar con Lismar, es talentosísima. Tengo otra canción con ella que espero salga después. bota es una canción para mover el culo.

boss

Mi bebé. El primer sencillo. Lo dejé hasta el final porque siempre digo “los últimos serán los primeros”. Solo por eso, mi TOC no me dejó dejar de pensar en esa frase. Por eso la puse al último. Es la canción con la que más me identifico. Logré lo que quería: sentirme poderosa, alabarme. El síndrome del impostor a veces te hace sentir menos. Creé una canción sobre mí y sí, soy una boss. Y sí, chambeo todo el día, todos los putos días, para ser una boss. Quero que la gente se identifique con eso. Me encanta, me hace sentir poderosa. Y ya… ¡necesito dormir!